Deportes — 21.08.2025 —
Gravísimos incidentes en la Sudamericana: Conmebol canceló el partido entre Independiente y la U de Chile
El partido fue cancelado en medio de una escalada de violencia en las tribunas. La Conmebol responsabilizó al club local y derivó el caso al Tribunal de Disciplina. El presidente de Chile repudió los hechos y exigió atención urgente a los heridos.
La Copa Sudamericana vivió una noche de extrema violencia en Avellaneda, donde el partido entre Independiente y Universidad de Chile fue cancelado por decisión de la Conmebol, tras una serie de gravísimos incidentes en las tribunas del estadio Libertadores de América-Ricardo Enrique Bochini. El encuentro, que estaba igualado 1-1, quedó definitivamente suspendido a los cuatro minutos del segundo tiempo.
Todo comenzó cuando, desde la tribuna Pavoni Alta, hinchas del conjunto chileno comenzaron a arrojar objetos y bombas de estruendo hacia el sector bajo, ocupado por simpatizantes locales. La situación se descontroló rápidamente: la barra de Independiente ingresó al sector visitante y se produjo una batalla campal, con corridas, enfrentamientos y destrozos. En medio del caos, un hincha cayó al vacío desde gran altura, lo que generó escenas de desesperación y una intervención urgente de la policía.
A pesar del fuerte operativo —compuesto por más de 650 efectivos de la Policía Bonaerense y seguridad privada— la violencia no pudo ser contenida y el árbitro Gustavo Tejera decidió detener el partido. Poco después, la Conmebol anunció la cancelación definitiva del encuentro.
“El caso será derivado a los Órganos Judiciales de la CONMEBOL para futuras determinaciones”, informó el organismo en un comunicado. Además, señaló que “se ha cumplido con lo establecido en el Manual de Clubes, sin que la situación se haya subsanado”, por lo que se procedió a la cancelación. La entidad también dejó entrever que podrían aplicarse sanciones a uno o ambos clubes, incluso con eliminación del torneo.
El presidente de Chile, Gabriel Boric, repudió lo sucedido y expresó en redes sociales: “Lo ocurrido en Avellaneda está mal en demasiados sentidos, desde la violencia en las barras hasta la irresponsabilidad en la organización”. Boric informó que su gobierno trabaja para asistir a los heridos chilenos y garantizar los derechos de los detenidos, en coordinación con la Embajada, el Consulado y los ministerios correspondientes.
Por su parte, el presidente de Independiente, Néstor Grindetti, atribuyó la responsabilidad al público visitante y aseguró: “Hay 90 detenidos de la U. de Chile. Corresponde una sanción al club chileno”.
El incidente ocurre en un contexto tenso, ya que la Universidad de Chile había sido recientemente advertida por la Conmebol por incumplimientos previos en seguridad. Ahora, el organismo deberá evaluar los informes policiales, registros fílmicos y las actuaciones de ambos clubes para determinar los pasos a seguir.
La decisión final del Tribunal de Disciplina podría incluir desde multas, sanciones, descalificaciones o incluso la anulación del resultado global (2-1 en favor de Universidad de Chile). Mientras tanto, el escándalo deja una nueva mancha en el fútbol sudamericano y expone, una vez más, la fragilidad de los operativos de seguridad en espectáculos deportivos de alto riesgo.
*Con información de AP, NA e Infobae.