Internacionales — 22.06.2025 —
China y Rusia condenaron el ataque de EE.UU. a instalaciones nucleares iraníes
Beijing y Moscú calificaron la operación militar como una grave violación de la Carta de las Naciones Unidas y advirtieron sobre el aumento del riesgo de una escalada regional.
Los gobiernos de China y Rusia condenaron enérgicamente los ataques lanzados por Estados Unidos contra instalaciones nucleares en Irán, y acusaron a Washington de violar el derecho internacional y agravar la inestabilidad en Medio Oriente. La ofensiva, confirmada por el presidente estadounidense Donald Trump, alcanzó los sitios de Fordo, Natanz e Isfahán durante la madrugada del sábado.
Desde el Ministerio de Asuntos Exteriores chino, un portavoz declaró que el ataque constituye una grave violación de los propósitos y principios de la Carta de las Naciones Unidas. “Esta medida de Estados Unidos exacerba las tensiones en Oriente Medio”, afirmó. Además, Pekín instó a las partes involucradas, especialmente a Israel, a cesar el fuego y abrir una vía de diálogo y negociación.
China también expresó su disposición a trabajar con la comunidad internacional para "defender la justicia y restaurar la paz y la estabilidad en la región".
Por su parte, el Ministerio de Relaciones Exteriores de Rusia señaló que la ofensiva estadounidense representa una “decisión irresponsable” que incrementa significativamente el riesgo de una escalada en una región ya afectada por múltiples crisis. Moscú subrayó que atacar el territorio de un Estado soberano con misiles y bombas, independientemente de las justificaciones esgrimidas, constituye una violación directa de las normas internacionales.
“Resulta especialmente alarmante que los ataques hayan sido llevados a cabo por un país miembro permanente del Consejo de Seguridad de la ONU”, indicó la Cancillería rusa.
Mientras tanto, Donald Trump celebró el operativo militar y sostuvo que “ha llegado la hora de la paz”, aunque advirtió que una eventual represalia iraní sería respondida con una fuerza aún mayor. Diversos líderes internacionales, sin embargo, consideran que la ofensiva representa una “peligrosa escalada” y un “acto criminal”.
La situación se mantiene en estado crítico, con la comunidad internacional dividida entre llamados a la contención y crecientes advertencias sobre las consecuencias imprevisibles del conflicto.